Greenpeace acusa a la central de Tula por Exceso de contaminación a los ojos de la nación

(LeMexico) – ¿Sabías que en 2020 hubo 3,9 millones de muertes ligadas a alguna enfermedad respiratoria en la CDMX? La mala calidad del aire agrava el riesgo de contraer alguna y esta central termoeléctrica es causal de ello.

En el marco de la conmemoración del Día de la Tierra, la asociación Greenpeace expuso el mensaje Exceso de contaminación, en un formato gigantesco del nuevo etiquetado para la salud, sobre un globo aerostático, frente a la central termoeléctrica de Tula. No es nuevo que se ha denunciado en varias ocasiones, incluso en LeMexico ya les hemos hablado de lo dañina que es esta central para la salud de los habitantes de Hidalgo, Puebla, Querétaro, Estado de México y Ciudad de México.

Tal cual, los datos crudos indican que esta central produce al año cerca de 16 mil muertes prematuras al año, es decir que tu mamá, tu papá, hijos, tíos, pareja, quien padece alguna enfermedad respiratoria, tú mismo incluso, estas siendo afectado por la emisión de gases contaminantes que emite la termoeléctrica. No importa que no vivas en Tula, como mencioné, afecta a las entidades circundantes, ya que los contaminantes se esparcen por medio del aire, de ahí que haya mala calidad en este elemento.

La central utiliza combustóleo, que al hacer la combustión como parte de las funciones de esta, emite carbono negro, dióxido de azufre y partículas PM2,5. Todos estos componentes son dañinos para el medio ambiente y, por ende, la salud humana. Demandas, notas, estudios que se han presentado tanto de Greenpeace como expertos en salud, han catalogado esta planta como obsoleta y la principal fuente de dióxido de azufre no sólo de México, ¡sino del mundo!

Varias administraciones federales han pasado desde su creación y ninguna ha sido capaz de modernizarla o en el mejor de los casos clausurarla y aprovechar otras fuentes que no contaminan ni causan tanto daño a la población. Lo alarmante es que quien ocupa ahora el poder, sigue apostando por el uso de combustóleo, que mata al pueblo de México, al que tanto dice procurar y cuidar.

¿Cuántos años más tendremos que perder a nuestros seres queridos por no presionar a las autoridades a que verdaderamente se responsabilicen por el ambiente?

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