El ascenso y caída de Evergrande
(LeMexico) – ¿Qué es el Evergrande, conglomerado en vilo de perderlo todo?
Básicamente, una empresa gigante con una deuda gigante, impagable, dirían algunos. Esto debido a la escasez de efectivo. Los más importantes expertos sugieren que, de no controlar esta situación, se puede hablar del momento Lehman Brothers de China. Esto causaría ondas de choque en la segunda economía más grande del mundo.
Bloomberg asegura que esta semana es importante para la compañía, pues debe “renegociar” los términos para devolver los intereses de algunos préstamos. Los pagos de los intereses de más de US $100 mdd vencen mañana, en dos de los bonos de la compañía.
Evergrande es uno de los desarrolladores inmobiliarios más grandes de China, que cotiza y es parte de Global 500, es de las empresas más grandes del mundo, hablando en términos de ingresos. Cotiza en Hong Kong y tiene su sede en la ciudad de Shenzhen, en el sur de China, y emplea a unas 200.000 personas. Mantiene indirectamente 3,8 millones de puestos de trabajo anuales.
La compañía jacta sus más de 1,300 proyectos en más de 280 ciudades, además se conocen sus intereses más allá del gigante asiático. Adicionalmente, su diversificación la ha llevado a invertir en vehículos eléctricos, parques deportivos y temáticos. Incluso posee un negocio de alimentos y bebidas, que vende agua embotellada, comestibles, productos lácteos y otros bienes en toda China.
Por si fuera poco, en 2010, la inmobiliaria se hizo de un equipo de fútbol, conocido hoy día como Guangzhou Evergrande. Aunado a ello, han construido -como era de esperarse- la escuela de fútbol más grande del mundo con un costo de US$ 185 millones para Evergrande.
Otro de sus ambiciosos proyectos es la construcción del estadio de fútbol más grande del mundo. Si su construcción se completa para 2022 -si la empresa no desaparece-, éste tendrá forma de flor de loto gigante, acomodará 100 mil asistentes y costará US $1,700 mdd.
Evergrande Fairyland es la línea turística de Evergrande, se trata de una división de parques temáticos, tiene una empresa masiva conocida como Ocean Flower Islan en Hainan, se trata con el mote del “Hawai chino“. Este proyecto se trata de una isla artificial con centros comerciales, museos y atracciones, se prevé que abra a finales de este año.
Sus problemas iniciaron hace pocos años cuando empezó a tomar financiamientos enormes y diversos para financiar sus actividades. Esto le trajo la mala fama de ser el desarrollador más endeudado de China, con más de US$ 300,000 millones en pasivos.
Los analistas aseguran que su problema fue la ambición: alejarse de su negocio principal. Mattie Bekink, director de la Unidad de Inteligencia de The Economist en China afirmó que “la situación es una enseñanza sobre el manejo de la diversificación“. También recalcó “La historia de Evergrande es la historia de los desafíos profundos [y] estructurales de la economía de China relacionados con la deuda“.
Los analistas de Goldman Sachs emitieron juicio al respecto afirmando que “la estructura de la compañía hace más difícil determinar una imagen más precisa de la recuperación“, aludiendo a la complejidad del Grupo Evergrande y la información insuficiente de sus activos y pasivos.
El problema no es el primero de su tipo, el año pasado, bastantes empresas estatales chinas no pudieron pagar sus préstamos, lo que acrecentó los temores de la dependencia de China por contraer deudas a través de inversiones.
Mark Williams, economista jefe de Capital Economics para Asia, parece haberlo dejado claro:
“El colapso de Evergrande sería la prueba más grande que el sistema financiero de China ha enfrentado en años. La raíz de los problemas de Evergrande, y los de otros desarrolladores altamente apalancados, es que la demanda de propiedades residenciales en China está entrando en una era de declive sostenido.
El continuo colapso de Evergrande ha centrado la atención en el impacto que tendría una ola de incumplimientos de los promotores inmobiliarios en el crecimiento de China”.
Evergrande ha tratado a toda costa de conseguir capital pero no ha encontrado compradores para su material de venta (acciones, partes de sus negocios, propiedades). Luego de las protestas en su sede en Shenzhen, con imágenes de Reuters, en las que muestran decenas de manifestantes en el lugar este lunes, abordando a alguien identificado como representante de la empresa, los accionistas han sido implacablemente cautelosos.
Fitch y Moody’s Investors Services cambiaron para mal las calificaciones crediticias de Evergrande, citando sus problemas de liquidez. Goldman Sachs escribió: “En nuestra opinión, la forma en que se resolverán las tensiones crediticias de Evergrande impulsará la confianza del mercado“.
En Wall Street siguen guardando la calma:
“No creo que el colapso de Evergrande y los problemas financieros de las empresas inmobiliarias chinas en general repercutan en la economía o los mercados estadounidenses”.
Mark Zandi, economista jefe de Moody’s Analytics
Los expertos sugieren que el Gobierno chino deberá intervenir para limitar las catastróficas consecuencias del colapso de Evergrande. Fu Linghui, portavoz de la Oficina Nacional de Estadísticas de China, indicó que el Gobierno seguirá de cerca el comportamiento y dificultades de “algunas grandes empresas inmobiliarias“.
Bloomberg recogió declaraciones anónimas acerca de las acciones de los reguladores. Estos dijeron que han contratado al bufete de abogados internacional King & Wood Mallesons, entre otros asesores.
Su deuda, en términos concretos, asciende a poco más de US $304,000 mdd, comparado quizá con el PIB de Rumania. Algunas de sus tácticas de recuperación más “singulares” son: ofrecer a sus acreedores pagos en especie como terrenos o acciones de alto valor pero de altísimo riesgo. También, puso a vender -y a comprar para ellos mismos- a sus empleados inversiones muy atractivas de altísimo riesgo.
Con todo, Evergrande tiene en puerta ostentosos proyectos que la comunidad financiera experta duda del cumplimiento: por ejemplo, en Suzhou, una ciudad cerca de Shangái, pretenden construir un enorme complejo residencial, con escuelas, parques y un barrio comercial estilo europeo. Muchos clientes afirman que se les han hecho cobros de gastos comunes, incluso antes de habérseles entregado las llaves o papeles de sus propiedades “yo aún no la conozco y ya la estoy pagando y gastando en ella“, afirmó una clienta de Evergrande.
El día viernes habrá noticias y actualizaciones al respecto de este asunto, se espera que el Gobierno chino -por el bien de China y del mundo- pueda intervenir satisfactoriamente.
