África colapsa por el calentamiento global y no hay un #PrayforAfrica
(LeMexico) – Mozambique, Nigeria y otros países de África occidental y oriental sufren por inundaciones mientras que en Zimbabue y Zambia se secan las cataratas Victoria por la sequía extrema.
En la segunda semana del mes, la ciudad más grande nigeriana de Lagos, con más de 21 millones de habitantes, quedó bajo el agua por la entrante temporada de lluvias. Han probado todo tipo de soluciones, pero ninguna ha sido lo suficiente efectiva para que todas estas personas se mantengan a salvo. Todo deriva en caos y es que cada año en promedio hay más de 275 mil nuevos habitantes, por la falta de planificación familiar, violaciones a menores y educación sexual.
Los habitantes de las zonas rurales llegan a la ciudad en busca de una mejor calidad de vida, como en todos los países. El servicio de alcantarillado y recolección de basura es insuficiente, se generan por día alrededor de 6 mil y 10 mil toneladas de basura. Pese al incremento poblacional y los servicios deficientes, la peor de las amenazas para los africanos es el calentamiento global, del cual este continente es el menos culpable. De seguir las precipitaciones pluviales con la misma intensidad, como en todo el mundo, Lagos, sus pequeñas islas, bancos de arena y manglares quedarán permanentemente inundados por la subida del mar.
Construyen ya la Gran Muralla de Lagos, con el apoyo de la ONU, la cual abarcará 8,4 kilómetros de longitud, con más de 100 mil bloques de hormigón con un peso de 5 toneladas y con una altura de 18 metros. De cualquier forma, deben buscar mejores soluciones. En Mozambique van saliendo de las inundaciones causadas por la tormenta tropical Guambe y el ciclón Eloise. Derivado de estos fenómenos se tuvieron que desplazar 270 mil personas y se puso en riesgo a 710 millones de niños. Para la ONU este es un ultimátum que nos dio la naturaleza, la cereza del pastel es el COVID que sigue latente.
Al día de hoy, las cataratas Victoria, uno de los principales atractivos turísticos del África Oriental, se ha secado. En estos momentos no son visibles sus 100 metros de caída de agua, en su punto más alto, ni sus 1,7 kilómetros de extensión entre Zambia y Zimbabue. Se forman de varias caídas que deja a su paso el río Zambeze. Esta noticia, a diferencia de las anteriores de las inundaciones, está dando vuelta al mundo, lo que origina que los turistas no vayan hacia allá y los comerciantes que viven de esta actividad lo resienten considerablemente.
La generación de la energía eléctrica en estas dos naciones depende de las hidroeléctricas. En las cosechas tampoco hay agua para que sean regadas, así que los habitantes sufren también de falta de luz y alimentos. Esto también es causado por los gases de efecto invernadero que dan como resultado el calentamiento global y, con él, climas extremos en periodos cortos y atemporales. Edgar Lungu, presidente de Zambia, dijo en conferencia que este es un duro recordatorio del daño que le estamos haciendo al planeta con los cambios drásticos de temperatura inducidos por la actividad del hombre.
Repito, África es de los continentes que menores emisiones genera. ¿Te parece justo? Y estas notas no son de difusión pública, es de lo que menos se habla en los medios convencionales, lo cual es alarmante porque, sí, yo sé que no vamos a cambiar el acelerado cambio climático de la noche a la mañana, pero sí podríamos habernos permitido enviar ayuda humanitaria, no veo que alguien impulse el #PrayforAfrica. Nos falta humanidad y unión para quienes padecen en estos momentos.
