De los creadores “todos nos vamos a contagiar” llega “mexicanos viajan a USA para vacunarse”

(LeMexico) – En Estados Unidos, la velocidad de inmunización ha incitado a los mexicanos viajar al país del norte para recibir la vacuna COVID-19.

Andrés Moreno, mexicano y padece asma. Debido a que tiene 31 años de edad es poco probable que este año le apliquen en México la vacuna, pues el ritmo que lleva el programa del Gobierno es lento. Por ello, decidió viajar a Estados Unidos para aplicarse la dosis.

Los mexicanos se encuentran superando el propio plan nacional, pues este acaba de terminar con la vacunación de personas mayores de 60 años.

Andrés Moreno, no es el único caso. Al menos uno de cada cuatro vacunados contra COVID-19 en los condados de la frontera del sur de Estados Unidos podría ser turistas, principalmente mexicanos, que anhelan recibir el medicamento, así apunto el Centro de Investigación sobre Turismo Médico (CMTR).

«Estadísticas nos muestran que probablemente hay decenas de miles de mexicanos u otros inmigrantes latinos que han venido a Estados Unidos por turismo de vacunas».

David G. Vequist, fundador e investigador del CMTR

Y es que, de acuerdo a los datos disponibles, México se comprometió con alrededor de 300 millones de vacunas para sus casi 128 millones de habitantes, lo cual lo convierte en el sexto país del mundo (sin contar la Unión Europea) que más dosis ha solicitado a las compañías y consorcios internacionales de vacunas.

Sin embargo, el plan de vacunación no se trata del esfuerzo para garantizar medicamentos, sino de la velocidad de la aplicación debe aumentar significativamente y apresuradamente, apuntan expertos nacionales e internacionales.

Aunque es muy difícil de llevar el control y estadística u conteo, existe un claro flujo de mexicanos que visitan el sur de Estados Unidos para vacunarse contra COVID. Principalmente desde Texas, Arizona y Luisiana.

Recordar que, no será hasta el 2022 de abril, si todo va de acuerdo con el Plan de las Autoridades Federales, que terminará vacunando a los casi 117 millones de personas que tienen como población objetivo.

No existe pretexto, ni argumento que justifiquen 12 meses de espera. Las autoridades deberían tener prisa por vacunar a la población de un país con más de 215 mil muertos: el tercero del mundo por total de números absolutos de decesos después de Estados Unidos y Brasil.

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