Agujeros azules: guardianes eternos de los secretos de la tierra

Nuestra tecnología nos ha permitido alcanzar sitios más allá de la tierra, otros planetas y nuestro satélite, sin embargo, no hemos avanzado tanto en la exploración de las capas de nuestro planeta.

Hasta hace poco es que investigadores finalmente pudieron descender en el gran agujero azul conocido como el Green Banana, que se encuentra en el Golfo de México, cerca de la costa este de Florida. No había sido explorado desde su descubrimiento en el siglo XX y se tienen contabilizados más de 20 agujeros azules.

Buzos expertos fueron los encargados de la primera inmersión en el mes de agosto. La boca de acceso al agujero mide 30 metros de ancho, los buzos llegaron hasta 128 metros de profundidad y se planea que para mayo del 2021 haya otra inmersión, al cual concluirá con el estudio de este agujero.

Las personas que ingresan, deben estar muy bien preparadas. Los investigadores crearon un módulo de aterrizaje de aproximadamente 225 kilogramos. Este módulo les permitió realizar mediciones y recolectar datos, cada uno de los buzos se sumergió con microcámaras en los trajes con las que se obtuvieron imágenes de la fauna del agujero. El análisis se realizó para la obtención de muestras biológicas, geoquímicas e hidrodinámicas.

Conforme a que los buzos del Tech Training, liderados por Marty Whatson, descendían hallaban cada vez menos seres vivos y poca visibilidad tanto por la ausencia de luz como por los sedimentos flotantes. De las primeras conclusiones del equipo, es que los agujeros azules no se forman de la misma forma que un cráter, pues son estructuras de roca caliza que puede ser muy porosa. Esto implica que tiene infinitos mini agujeros, el paso del agua con el tiempo crea aberturas y hendiduras.

Describen los buzos lo fasinante que es estar al borde de los agujeros azules, pues la mayoría se encuentra alrededor de aguas poco profundas, lo que los vuelve visibles incluso desde el espacio exterior, que les da una impresión de ser un escenario erosionado y sin vida.

Conforme se acercan se empieza a ver la vida: impresionantes pastos marinos, corales blandos que se extienden en lo profundo. Da una impresión de entrar en otro mundo, pues estos corales llegan a estar de cabeza.

También reiteraron que hay una interconexión con los mantos acuíferos submarinos con los agujeros. Esta información ayudará a un mejor cuidado y protección del medio ambiente marino. El cambio climático daña a los océanos con la acidificación, la cual hace cambios en la química de los mares del mundo. Al cambiar el pH marino se daña a las especies animales y por supuesto los más afectados, los corales.

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