A marchar en paz
La idea de la marcha es regular la fuerza pública y eliminar el abuso de poder en las manifestaciones.
Uno de los temas constantes en el desarrollo de las manifestaciones en la Ciudad de México es la gran cantidad de delitos que se llevan a cabo. Esto no precisamente por las personas que apoyan la marcha, sino por algunos infiltrados y ciertos individuos que ven esta forma de protesta como la oportunidad perfecta para cometer delitos e intentar pasar desapercibidos.
El nuevo “protocolo para la atención de marchas y protestas en la Ciudad de México” busca romper con esta constante y expresa que quienes cometan alguna falta serán detenidos.
Para dar a conocer algunas medidas, el día de ayer, Alfonso Suárez del Real (secretario de Gobierno) desarrolló una videoconferencia en donde dio a conocer que el documento es acorde al reconocimiento de los Derechos Humanos de los individuos. Se reconocen tanto los derechos de los manifestantes como los de los elementos de seguridad, pues estos últimos son quienes podrían negarse a llevar a cabo algunas acciones para no atentar contra derechos constitucionales. Declaró que justo pensando en ellos se crearon estas disposiciones.
Además, dio el ejemplo del caso en el que algunas personas portaran artículos con los que podrían causarle daño a los manifestantes. Expresó que los elementos de seguridad serían los encargados de solicitar a las personas dejen de portar los artefactos para poder continuar transitando en la manifestación.
Exclamó que si las personas no hacen caso un elemento deberá acompañarlos durante todo el recorrido garantizando que no causarán daños. Entre otras de las medidas implementadas se encuentra el que los policías deberán portar en sus chalecos su número de identificación, así como promover el diálogo entre los manifestantes.
Con la puesta en marcha de estas medidas no se pretende disolver las manifestaciones, sino que se desarrollen en un clima de paz, pues la libertad de expresión es un derecho. Otra de las medidas es promover la participación y protección a los periodistas y esto resulta rescatable pues muchos medios de información terminaban siendo agredidos en manifestaciones.
Por su parte, Nashieli Ramírez Hernández, presidente de la CDH manifestó que el protocolo busca regular la fuerza pública y así prevenir la brutalidad y el abuso de poder.
