Nuevos peludos inquilinos del Zoológico de Aragón
Dos bebés lobos mexicanos están en buen estado y ayudarán a la preservación de la especie en el Zoológico de Aragón. Su nacimiento es gracias a un acuerdo binacional de México y Estados Unidos.
Los cachorros nacieron el pasado 19 de abril. Es hasta el 17 de junio que los veterinarios del zoológico pudieron hacer el primer control médico, constatando que son dos machos en perfecto estado de salud. Cada uno pesa 7 kilos y son hijos de Joy, la hembra de 3 años que alberga el zoológico.
Esto lo reveló por medio de Twitter la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México.
El nacimiento de estos pequeños ayuda a la preservación de su especie, que se encuentra en peligro de extinción. Aún falta mucho por hacer para perpetuar a esta magnífica especie endémica de nuestro país. Es parte del Programa Binacional México-Estados Unidos para la Recuperación y Conservación de esta especie.
El canis lupus baileyi, es decir, el lobo mexicano, es una subespecie más pequeña del lobo gris. Estaba presente en Arizona, Nuevo México, Texas, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango, Zacatecas, Jalisco, San Luis Potosí, Guanajuato y hasta Oaxaca. En 1915 y 1925, 900 lobos fueron eliminados en territorio estadounidense y en los años cuarenta los últimos lobos de Arizona fueron cazados. Finalmente, en 1949 la Asociación Fronteriza mexicana-norteamericana lanzó una campaña de erradicación del lobo debido al peligro que representa para el ganado y la supuesta transmisión de rabia.
En 1976 el lobo mexicano fue incluido en la lista de animales en peligro de extinción de Estados Unidos. En México, la Norma Oficial 059 lo consideró hasta 1994. Pero en el año 1980 el entrenador y exjugador de hockey Roy Mcbride capturó 5 lobos silvestres, 4 machos y una hembra preñada, en Chihuahua y Durango. Posteriormente, fueron enviados al Museo del Desierto de Arizona-Sonora en Tucson y esto dio inicio al Programa Binacional México-Estados Unidos para la Recuperación y Conservación del lobo mexicano.
Gracias a este programa, en el 2014 nació el primer lobo mexicano en su reintroducción al entorno salvaje. Se estima que el número de ejemplares en la naturaleza es de 44, en cautiverio son alrededor de 300, dio a conocer la SEMARNAT en el 2018. Sus principales depredadores son felinos de gran tamaño como el puma y el jaguar, entre otros están los osos y los zorros, pero su más grande amenaza es el ser humano.
