Trump se alista para suspender visas “por la pandemia”
La pandemia del coronavirus se ha convertido en la excusa para que la Casa Blanca desempolve planes para proliferar una política de ‘tolerancia cero’.
El 11 de marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia a nivel mundial por el COVID-19, momento en el que Donald Trump decidió pivotar y declarar, desde el Despacho Oval, la guerra al “virus extranjero”. La absolución del presidente, gracias a la mayoría republicana en el Senado, le otorgó de una forma tácita poder más que suficiente como para seguir actuando como había hecho hasta entonces. Riesgo, ventura y desgracia estaban por asaltar a los estadounidenses.
La expansión del coronavirus en todo el mundo ha afectado a estos tres ámbitos muy interrelacionados: el sanitario, el económico-social y el político. Dejando al descubierto a gobiernos políticamente débiles y con poco margen para incrementar el gasto público. Estados Unidos no es la excepción.
Estados Unidos anunció planes para imponer cambios y restricciones a sus programas de inmigración. La Casa Blanca se alista para la restricción en visas para profesionales extranjeros. La restricción estaría vigente por un período de entre 90 y 180 días, afectará a las visas H-1B y L-1 y la suspensión se basa en la pandemia de covid-19 que tiene bajo emergencia al país desde marzo.
No obstante, recordemos que desde el pasado 22 de abril Trump firmó una orden migratoria que suspendió por 60 días la inmigración al país bajo el argumento de salvaguardar y proteger a los ciudadanos del COVID-19. Aseguró el mandatario, es para priorizar y proteger los trabajos para los estadounidenses afectados por la crisis de salud pública.
Finalmente, el mensaje es inconfundible: quieren menos extranjeros, incluso si son profesionales. Trump ha sido mencionado y acusado de actuar peligrosamente en plena pandemia.