Los nombres de ex presidentes del PRI vinculados al caso Lozoya
La polémica no ha terminado, ya que han emergido algunos nombres de la investigación elaborada por la auditoría superior de la Federación.
Los principales nombres que aparecen dentro de la estructura de los funcionarios que hicieron parte de la compraventa de Agro Nitrogenados se encuentran Pedro Joaquín Coldwell y Enrique Ochoa Reza, ambos ex presidentes del partido revolucionario institucional en la época de gobierno de Enrique Peña Nieto.
La Auditoría Superior de la Federación identificó en su denuncia los principales responsables dentro de los 38 funcionarios y consejeros de Pemex pm holdings, PMI Norteamérica, PMI infraestructura y desarrollo y Pro Agro Industria, involucrados en la operación de compra y venta de Agro Nitrogenados.
Además de Lozoya Austin, en la lista aparecen Edgar Torres Garrido, asesor ejecutivo del exdirector de Pemex, José Manuel carrera Panizzo, ex consejero propietario y presidente del consejo de administración del PMI Norteamérica; Pedro Joaquín Coldwell quién era secretario de energía y consejero presidente del consejo de administración de Pemex; y Enrique Ochoa reza, en ese momento subsecretario de hidrocarburos en la secretaría de energía.
Dentro de la larga lista también son señalados Leonardo Favio Beltrán Rodríguez, que en ese momento era subsecretario de planeación y transición energética de la secretaría de energía, y Miguel Messmacher Linartas, el subsecretario de ingresos de la secretaría de hacienda y crédito público (SHCP).
Fue así como la ASF estableció que el daño por la adquisición de la planta es de 93.2 millones de dólares y que esta operación se realizó sin los estudios previos de integridad mecánica de equipos ni la revisión técnica de los bienes para clasificar los activos de la empresa.
Según la relatoría, una vez concretada la compra venta, se detectó el 60% de los activos de Agro Nitrogenados como chatarra, de los cuales 85 bienes tuvieron un costo de adquisición de 15.5 millones de dólares, unos 199.2 millones de pesos, tuvieron que venderse como tal en distintas fechas hasta julio de 2016. Como parte de la venta de esta chatarra, Pemex recibió 16.8 millones de pesos, lo que generó una pérdida de 182.4 millones de pesos.
Dicha carpeta de investigación es distinta a la anterior que se abrió el año pasado, en la que se vincula al proceso a Lozoya Austin con número 211/2019 a la cual se vinculada también a Alonso Ancira.
Aunque la carpeta se inició en el 2019, Joaquín Coldwell solicitó a la FGR que lo cite para informarle sobre la posible relación que tienen el asunto.
(con información de El Universal)
