Un pequeño respiro a la tierra en Yucatán: Semarnat rechaza 6 granjas porcícolas

El incremento del consumo de carne ha propiciado la creación de estas granjas que erosionan el suelo dónde se instalan y generan una cantidad excesiva de aguas residuales.

La organización Greenpeace México y el grupo Indignación presentaron un reporte del daño que estas granjas generan en la región y evidenció que se encuentran dentro de zonas de cuidado ambiental.

La carne que está consumiendo al planeta es el nombre del documento, en el estado existen 257 granjas de las cuales el 47%, es decir, 122 granjas se encuentran en sitios de protección para la biodiversidad. Aunado a esto, es de las industrias que más agua consume y desecha, con una serie de toxinas emitidas por los animales que, al estar en contacto con agua potable, la contamina.

La compañía responsable de la mayoría de estas granjas porcícolas es el grupo conocido en la localidad como Grupo Kekén, para este 2020 pretendían duplicar su producción de carne de cerdo.

El Grupo Porcícola Mexicano, conocido como Grupo Kuo presentó el proyecto para establecer 6 granjas en las localidades de Tixmehuac y Maní. La Semarnat lo rechazó al no presentar un plan concreto del tratamiento de aguas residuales ni el aseguramiento de que evitaran dichos residuos entren en contacto con los mantos freáticos (cenotes). Su Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) presenta como ausente este punto y sin considerar el impacto acumulativo y sinérgico de las granjas cercanas.

Para este rechazo la Semarnat consultó con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas sobre las zonas donde se pretendía poner las granjas y el INPI informó que esas zonas son de asentamiento indígenas. Por lo tanto, para conseguir cambiar el veredicto se debe realizar una consulta a los propietarios legítimos de las tierras que son los pueblos indígenas, quienes por supuesto no lo van a permitir, y hacer un cambio de uso de suelo de acuerdo a la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable en el artículo 61.