Cielo alienígena, gracias a la New Horizons

A más de seis mil millones de kilómetros de la tierra, la sonda espacial no tripulada captó imágenes de las estrellas más cercanas al planeta. Es una visión que desde la tierra no podemos tener.

En los pasados 22 y 23 de abril, la sonda New Horizons apuntó su cámara telescópica de largo alcance al par de estrellas más cercanas a la tierra, que son la Proxima Centaury y Wolf 359. Esta hazaña representa una visión única de dichas estrellas, fuera de este planeta, literalmente.

Usando el efecto paralelaje, que los científicos han usado con anterioridad para determinar la distancia de las estrellas, es que se puede ver cómo parece que una estrella se mueve contra su fondo vista desde diferentes lugares. Desde la tierra, una forma de hacer paralelaje es extender un brazo y colocar un dedo frente a nuestro cambio de visión, cerrar un ojo de forma alternada y ver la manera en que la estrella salta de un lado al otro cuando es observado por cada uno de los ojos.

Le da un efecto de movimiento a la estrella, al igual que para los científicos que con las diferentes imágenes que ha enviado la sonda han podido reacomodarlas para que sea visible el efecto. También produce el efecto tridimensional de las estrellas flotando frente a los campos de estrellas de fondo:

“El experimento New Horizons proporciona la línea de base de paralaje más grande jamás creada, más de 4 mil millones de millas, y es la primera demostración de un paralaje estelar fácilmente observable”, explicó Tod Lauer, miembro del equipo científico de New Horizons.

Las imágenes complementarias, es decir, de las estrellas de fondo, fueron proporcionadas por el observatorio Las Cumbres, provenientes de un telescopio remoto en el observatorio Siding Spring en Australia y otro telescopio remoto en el observatorio del Monte Lemmon en Arizona gracias a los astrónomos John Kielkopf (Universidad de Louisville) y Karen Collins (Harvard y Centro Smithsonian de Astrofísica).