México es el segundo lugar con más jaguares en América

(LeMexico) – El 29 de diciembre se conmemora el Día del Jaguar, el felino más poderoso en América, su mandíbula es tan fuerte que puede atravesar el caparazón de una tortuga. Descubre más datos.

Es el rey de los felinos en América y el depredador más feroz. Es superado por el tigre tibetano y el león. Sus manchas o rosetas son únicas en cada espécimen, funcionan como si fueran sus huellas dactilares. Es el único del género Panthera en este continente. Su rugido suena como un ronquido repetitivo. El rugido es un característico de este género, de acuerdo con la WWF.

Su nombre proviene del tupi – guaraní, de la palabra yaguara, que significa el que caza de un salto. Puede habitar diversos ecosistemas, entre ellos las selvas bajas tropicales y los bosques subtropicales. En nuestro país tenemos gran abundancia de plantas y animales, dentro de ellos están los jaguares y somos el segundo país con animales de esta especie, en primero lugar está la amazonia.

Es una especie sombrilla, es decir que otras especies son protegidas por la presencia del jaguar en un hábitat, pues al ser un animal en peligro de extinción debe tener reservas naturales para su conservación. Esta protección se hace extensiva a especies de menor tamaño que habitan estos espacios, los cuales deben ser grandes y amplios para permitir su reproducción y desarrollo. Esta es una de las razones por las cuales el jaguar nos ayuda a mantener ecosistemas sanos, la segunda es debido a que, al ser los más grandes depredadores de América, regulan el tamaño de otros animales.

Pueden pesar de entre 45 y 120 kilos y alcanzar una longitud de 1,5 a 2,4 metros. La variación depende de la región, en Sudamérica están los más grandes. Su periodo de gestación es de 100 días aproximadamente, por lo general tienen dos crías. Las hembras se quedan con los cachorros hasta un año y medio, máximo dos años que es la edad en la que alcanzan la madurez sexual. Su esperanza de vida va de los 10 a 12 años, viviendo en la naturaleza.

Su menú es variado, pueden comer hasta 22 especies, entre ellos reptiles, aves, peces y mamíferos. Los panterinos habitan el planeta desde hace 6,4 millones de años. El fósil más antiguo que se tiene data de 25 millones atrás, hallado en Laugnac, Francia. Se cree que este animal viajó por casi todo el territorio cuando ocurrió la dispersión transcontinental entre Norteamérica y Asia, hace 0,9 millones de años. Desde entonces, los jaguares fueron parte de América.

En México lo tenemos catalogado como en peligro de extinción, en otras partes del mundo aparece como casi amenazado de acuerdo con la Lista Roja de Especies Amenazadas. Fue eliminado en las zonas del norte secas, como Nuevo México, Arizona, el extremo norte de Estados Unidos colindante con México y al norte de Brasil y en los pastizales de matorral pampeano en Uruguay y Argentina.

El área que habitan es el 8,6% de la superficie del planeta, sin embargo, en estas mismas regiones, está casi el 28% de la biodiversidad en todo el mundo. Además de generar beneficios colaterales a los habitantes cercanos a su hábitat, que son 53 millones de personas alrededor. El 80% de los jaguares está en Brasil, equivalente de unos 57 a 64 mil especímenes. En Uruguay y El Salvador esta extinto.

Nuestra selva Maya alberga la segunda gran masa de jaguares, hay programas para evitar el conflicto humano – depredador. Uno de ellos pretende convertir a los ganaderos en aliados que protejan la vida de estos animales, resguardando en una cerca eléctrica a su ganado. El desarrollo humano ha sido el causal de muchas bajas de jaguar, mientras más nos reproducimos se quita el espacio a los animales para la imposición de edificios o construcciones con fines de habitación.

Desde México a Argentina hay un corredor biológico de monitoreo de jaguares, de las poblaciones que conforman, así como su tendencia en presas para generar estrategias de conservación. El jaguar es emblemático de nuestro país, es por ello de vital importancia que exijamos a las autoridades que nos ayuden a generar acciones verdaderas para conservar a los que nos quedan. Principalmente los de la zona sur del país. Pedir penas severas y efectivas a quienes trafiquen con estos felinos y, toda la fauna en peligro de extinción.

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