¿De qué va la Ley General de Bienestar Animal y por qué enfurece a biólogos y activistas animales?
(LeMexico) – Arturo Islas Allende, Pregúntale al biólogo, Damianimals, Leno Sierra, entre otros activistas ambientales convocaron a una protesta en el senado de la república para impedir sentimentalismos en esta ley.
Los senadores Ricardo Monreal y Roció Abreu, junto con el director de Animal Héroes, Antonio Franyuti, y el representante de esta organización y presentador televisivo Marco Antonio Regil, presentaron esta iniciativa de ley, con una base jurídica pareja. Pero, ¿por qué molesta tanto a los animalistas, biólogos y veterinarios?
Comenzando por que esta ley la propone un presentador de televisión (¿qué hace inmiscuido en estos casos Marco Antonio Regil?) y Franyuti estuvo presente en la iniciativa de ley impulsada por el Partido Verde Ecologista en la que se prohibió el uso de animales en los circos, lo cual estuvo perfecto. El problema es que no se les dio un destino digno a estos animales, no hubo un después para ellos en esta ley. Ahora, están en malas condiciones, abandonados, enjaulados y en espacios muy reducidos, como fue el caso del famoso elefante Big Boy.
Entonces, vamos por pasos. ¿De qué trata esta ley? Quieren reclasificar a los animales en animales de compañía, animal en trabajo y animales para consumo humano para hacer una diferenciación en la interacción entre animal y humano. Esto da por sí mismo un trato más competente a las autoridades y la persecución de posibles delitos o crímenes hacia los animales. La iniciativa busca prohibir la experimentación de animales con fines de enseñanza y didácticos, así como las mutilaciones estéticas, e incorporar al término maltrato o crueldad animal, la zoofilia y abandono de animales.
Piden quitar el secreto industrial sobre la información de las condiciones animales de las empresas que lucran con animales y prohibir criaderos en inmuebles habitacionales. Penas de hasta 6 años de cárcel a los maltratadores animales a nivel nacional (hasta el momento cada estado establece sus propias sanciones por maltrato animal), que en los aviones se permita llevar trasportadores para perros y gatos en las cabinas de pasajeros e incluir en los libros de texto gratuitos de la SEP, secciones de respeto animal.
Hasta aquí vamos bien, siguen las secciones en las que no consideraron la opinión de ningún zootecnista, veterinario o experto en el tema animal: la propuesta de transformación de los zoológicos en Unidades de rehabilitación, reubicación y santuarios de fauna endémica, animales silvestres y exóticos y el dar en venta o adopción a algún animal sin que este esté esterilizado, a excepción de algunas ocasiones.
Los animalistas explican que estas propuestas parecieran son únicamente considerando a los animales de compañía, lo cual en parte está bien pues el abandono de estos animales domésticos ha causado la reciente proliferación de perros ferales y gatos en las calles que están cazando aves que desarrollan un papel importante en los ecosistemas aun tratándose de aves en la ciudad. Sin embargo, el resto de los animales tienen un manejo diferente.
El hacer que los zoológicos sean santuarios les daría categorías de las de Unidades de Manejo para Conservación de la Vida Silvestre o UMAS, en las cuales no se permitiría el acceso al público. Por ello, no habría ganancias generadas de la venta de boletos, quitando así los recursos para reinvertir en el mantenimiento de dichos lugares, los hábitats de los animales que no pueden ser reincorporados a la vida silvestre por el tiempo que estuvieron en cautiverio y en contacto con humanos y no se generarían ingresos para pagar a todos los especialistas que allí trabajan.
Nos guste o no, en las UMAS, la población animal está controlada y en algunas permiten la caza de los animales, como la cetrería, el uso de aves rapaces para la caza recreativa. El pago que realizan los practicantes de estas actividades ayuda a el mantenimiento de las unidades, a la investigación y preservación de los animales, cuidadores, veterinarios y personal en general de las unidades. Este es el sentimentalismo que tanto critican los expertos animales, pues los centros de conservación han sobrevivido gracias a la exhibición responsable y actividades cinegéticas, pues aunque sí hay recursos públicos, estos han sido asignados a otros rubros públicos y obstinaciones federales.
Sin duda alguna, hay malos zoológicos, malos cuidadores y un mercado negro de animales silvestres. Estos son los temas que, de acuerdo a los expertos animales, deberían enfocarse en resolver los tres niveles del poder. Inclusive, los mismos poderes deberían comenzar por educarse al respecto del cuidado animal, vegetal y ambiental, pues quienes aprueban y promueve las leyes no tienen un ápice de estas temáticas, comenzando por el gobierno federal, han sido incontables las ocasiones en las que promueven leyes a dedazo, por corazonada, por defender ideales políticos de antaño. Es evidente el desconocimiento en estas materias. A México no sólo lo compone una economía, empresas, negocios y los habitantes mismos, también somos nuestra riqueza cultural y ambiental animal y vegetal, hay que procurar el bienestar integral de todo lo que nos compone.
Después de esto, la población en general también debemos ser concientizados e instruidos en el trato animal, pues siendo sumamente honestos, los mexicanos no tenemos una cultura de respeto a otras formas de vida. Nos hemos quedado con arcaicas tradiciones e ideas que nos llevan a pensar que somos dueños de los animales, que podemos usarlos para entretener, para hacer compañía, como el caso de loros, pericos y últimamente, erizos, suricatos, monos araña, entre otros animales que no son de compañía.
Contra la ignorancia en el trato animal, público gubernamental y empresarial, es lo que los animalistas piden que se comience, que no se use la causa animal mal planteada para la obtención de votos ni de campañas políticas. Es por ello que se convocó a una marcha el día de hoy en protesta a esta iniciativa de ley y para que los niveles de gobierno creen leyes considerando a personas que verdaderamente conocen del tema, la cual partió del monumento a la Revolución hacia el Senado de la Republica, donde se hicieron presentes los divulgadores: Arturo Islas Allende, Dulce de Pregúntale al biólogo y Damianimals.
También se realizó una marcha en Paseo Montejo en Yucatán, con la misma consigna, que las autoridades vayan de la mano con la ciencia. Sin duda la lucha seguirá y puedes ver su desarrollo con los hashtags #BienestarAnimalconCiencia #YoSíMeInformo, así como al veterinario, biólogo o zootécnico de tu preferencia y, no solo eso, no olvides que es fundamental unirnos a estas protestas y exigir también a las autoridades que tomen cartas en el asunto animal, ambiental y vegetal.
