¿Qué tiene de malo tener un tatuaje? Joven italiano se tatúa su pasaporte sanitario COVID-19

(LeMexico) – El título es sorprendente, pero es una realidad. Un estudiante jovial de aproximadamente 22 años en Italia se convirtió en una locura y boom en las redes sociales, pues optó por tatuarse el código de barras de su certificado COVID en el brazo.

Tras la postura francesa, Mario Draghi, el primer ministro italiano, optó y señaló que desde el 6 de agosto del 2021 será necesario el pasaporte sanitario para toda la población, provocando revuelo y sensaciones de disgustos en muchos de los habitantes.

Este adolescente que responde al nombre de Andrea Colonnetta compartió al diario Corriere della Calabria que “evidentemente es algo original, pues me gusta ser diferente“, en alusión a su nuevo tatuaje. “Después de todo, el diseño está grabado en tu piel y tú has pagado al artista por ello, así que estos deben ser únicos”, agregó, después de lucir el código QR de su pase sanitario.

El adaptarnos a esta nueva normalidad es reconocer, identificar y aceptar que ahora el sentarnos en el interior de los bares, cafeterías o restaurantes, incluso en algún espectáculo al aire libre, en museos, cines, teatros, gimnasios, conciertos, congresos u otros eventos masivos, será obligatorio mostrar el pasaporte sanitario COVID-19, identificación que ahora se tornará obligatoria en nuestras actividades del día a día.

Para conseguirlo se debe demostrar la vacunación -al menos una dosis-, o en su defecto una prueba negativa de menos de 48 horas o haber pasado el COVID-19 en los seis meses anteriores.

Extender el uso del certificado verde no es arbitrario, sino una condición para tener abiertas las actividades económicas”, ha explicado Mario Draghi.

“Es una medida con la que los italianos pueden divertirse, ir al restaurante, con la garantía de encontrarse entre personas que no son contagiosas”.

En suma, a pesar de que se intente tener un mejor control y manejo de los contagios por coronavirus, el pasaporte ha suscitado un sinfín de manifestaciones en todo el país, al verse como una obligación el vacunarse. Aquel que no cuente con la certificación, sin preámbulos ni explicaciones, quedará prácticamente aislado del ocio y la cultura de la nación.

Acabar con los mitos y datos sobre las vacunas contra el COVID-19 es imposible, pero algo de lo que todos estamos seguros y seguras es de la responsabilidad que nos compete a cada individuo con el afán de no agravar la pandemia que ya ha repercutido fuertemente.

Back to top button