Inestabilidad en lo océanos, estamos al borde de un colapso climático

(LeMexico) – Científicos en los últimos años encontraron que la Circulación de vuelco meridional del océano Atlántico, AMOC, podría extinguirse, creando cambios bruscos en la temperatura global, entre otros problemas.

El estudio fue publicado la semana pasada en la revista Nature Climate Change. En él, analizan con registros de más de un siglo, de temperaturas y salinidad en el océano Atlántico, en el cual el AMOC se encarga de transportar agua caliente y salada desde los trópicos hasta el hemisferio norte, a Europa y, a su vez hace que el agua fría circule hacia el hemisferio sur. Esta agua corre al fondo del océano y la caliente más arriba, en la superficie.

Sin embargo, detectaron que esta cinta transportadora natural podría estarse apagando, pues hicieron comparaciones con el último cambio climático, encontrando una situación similar, creando cambios bruscos en la temperatura global. Como tal, no han analizado la desaceleración del AMOC, pero con estos registros encontraron 8 medidas indirectas a el que afectan la fuerza de circulación. Es decir, se está acabando, haciéndolo susceptible a desequilibrarlo o interrumpirlo.

Niklas Boers, autor del estudio e investigador del Instituto Potsdam para la Ciencia del Impacto Climático en Alemania, explicó que, de suceder esto, el frío que experimentan en Europa y América del Norte sería extremo, también elevando el nivel del mar en la costa este de Estados Unidos. Climáticamente, interrumpiría los monzones, son lluvias intensas, no continuas, al noreste del hemisferio, proveyendo agua en todo el planeta, aumentando la compresión, acercándonos a un punto de inflexión.

Este estudio no se estipula una fecha de el momento en que podría suceder este cambio, pero, al haber un punto de inflexión, debería ser un mensaje lo bastante fuerte para tomar medidas y evitar el colapso. El AMOC es un enorme suceso en busca de equilibrio en todo el océano que inicia desde los trópicos y va hasta casi el Ártico, crea la corriente que conocemos como la corriente del Golfo. Las altas temperaturas tropicales calientan el agua del mar y aumenta la proporción de sal al evaporar dicha agua, fluyendo al norte.

Al correr y ganar latitud, se vuelve más fría, haciendo las aguas cargadas de sal más densas. Ya en Groenlandia, es demasiada densa que se hunde, empujando a otras aguas sumergidas hacia el sur, rumbo a la Antártida, haciendo una mezcolanza de corrientes oceánicas, parte del sistema global, surgiendo la circulación termohalina, el corazón del sistema climático y la regulación del patrón climático del planeta entero.

El calentamiento global está cambiando todo este equilibrio. Las temperaturas altas producen que las aguas se vuelvan más ligeras y cálidas. El agua dulce que proviene del derretimiento de los polos y glaciares diluyendo la sal de las aguas del atlántico Norte, reduciendo su densidad y recordemos que las aguas densas van hacia debajo de la superficie y hacen que todo circule, esto hace que el AMOC se cierre.

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