¿Quién era Jovenel Moise?
(LeMexico) – El Gobierno de Moise fue enmarcado por la violencia creciente y sin ningún tipo de contrapoder. Disturbios y quejas fueron muy constantes en su Gobierno desde el 2017, pues aún no había certeza del término de su mandato.
“Él fue el Presidente que quería cambiar a Haití y al cual Haití devoró”.
Lucas Proto
La condición natal de Jovenel fue muy pobre, nacido en Trou-du-Nord, al noroeste, hijo de un mercader y una costurera. Esto no lo detuvo y pasada su niñez se mudó a la capital donde cursó estudios en Ciencia Política. Además, inició su carrera como empresario bananero.
Luego de haber ganado las elecciones en 2015, sus opositores no admitieron la derrota y convocaron a la anulación para volverlas a realizar, pero se aplazaron tres veces, dos por violentas protestas públicas y luego el paso del huracán Matthew.
Para estas elecciones había sido propuesto por Michel Martelly como candidato por el Partido Haitiano Tèt Kale (PHTK); en la segunda vuelta, ya para 2016, Moise venció con el 55% de votos para que en 2017 asumiera el cargo. Las cifras oficiales del Consejo Provisional Electoral, Moise ganó la presidencia con el 55,67% de los votos; seguido de Jude Célestin, de Moïse la Liga Alternativa para el Progreso y la Emancipación Haitiana (LAPEH), con el 19,52% de los votos; en el tercer lugar se ubicó Moïse-Jean Charles, del partido Pitit Dessalines, que obtuvo el 11,04% de los votos. En cuarto lugar quedó Maryse Narcisse, candidata por Fanmi Lavalas, que recibió el 8,99% de los votos.
Nadie estuvo contento. Para 2019, las protestas y violencia iban de la mano, este año, en Febrero, el Consejo superior judicial de Haití intentó dar fin al gobierno de Moise considerando que había empezado en el 2016, pero el Presidente alegó diciendo que su mandato dio inició en 2017 y terminaría -si así él lo convenía- el siguiente año.
El Presidente mantuvo lo que “quedaba de Gobierno” con decretos, sin ningún contrapeso legislativo y mantenía la idea de un referéndum constitucional. Esto sólo provocó el enfado de la sociedad civil quienes rechazaron la propuesta y encendieron el reclamo de ilegitimidad de su mandato.
Algunos opositores lo acusaron de querer llevar su Gobierno hacia una dictadura cuando aprobó un decreto donde declaraba que ninguna corte auditara los contratos del Gobierno y también cuando inició la creación de una agencia de inteligencia que sólo trabajaba directamente para el Presidente. Además, mandó a arrestar y destituir a tres jueces del Tribunal Supremo con el fin de “evitar a toda costa que la Corte se involucre en la política” porque esos jueces demandaban su renuncia o la organización de elecciones.
Aunado a esto, las promesas de campaña no habían sido cumplidas en ningún porcentaje: no hubo empleos ni seguridad social, la delincuencia aumentó históricamente, no hubo exportación ni modernización agrícola, la inflación se comió los “pobres“, sueldos de la clase trabajadora y la pobreza crónica incrementó considerablemente.
Al ver esto, el Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos y Europa convinieron una llamada de atención a Jovenel para celebrar elecciones legislativas y presidenciales libres de corrupción y cargadas de democracia. Su mandato fue por decreto autónomo, debido a que el mandato del parlamento expiró en enero del año pasado.
«Jovenel Moïse destruyó todas las instituciones, desde el parlamento hasta el gobierno local. Está claro lo que quería hacer. Desafortunadamente, tenemos una comunidad internacional que no apoya la lucha contra este dictador corrupto».
Nenel Cassy, líder de la oposición y exsenador
Con todo, EU, la ONU y la OEA apoyaban su mandato un año más, pero Moise tornó esto a una situación que se veía -desde todos los ángulos- como un tema de antidemocracia, “pegándole” al autoritarismo.
La vida política de Jovenel Moise ocurrió como un tamo en el panorama internacional, casi cinco años de Gobierno, que en contexto, fueron bastantes en comparación desde hace 35 años.
