COVID-19 y medio ambiente
(LeMexico) – Hoy 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente y, por segunda ocasión consecutiva, esta celebración se da dentro de un contexto de pandemia global que ha generado tanto beneficios como retrocesos en el cuidado del medio ambiente.
Se sabe que la actual crisis sanitaria por COVID-19 está relacionada con el cambio climático, la destrucción de la biodiversidad y la hipermovilidad humana. Esto, debido a que los coronavirus, propios de algunos animales, pudieron haber saltado a los humanos a causa de la destrucción de hábitats y el consumo de especies salvajes, mientras que su propagación a nivel mundial se debió al desplazamiento humano por todo el orbe. En tanto que el cambio climático ha facilitado que los virus ya no sean estacionales y permanezcan activos durante un periodo más largo, incluso durante todo el año.
Entre los beneficios que ha dejado la pandemia está la reducción significativa de emisiones de dióxido de carbono (CO2), responsables del cambio climático, en países afectados por el COVID-19 -como China y Estados Unidos-, a causa de la reducción o paralización drástica de actividades industriales, así como por la desaceleración de la movilidad de las personas, debido a las medidas adoptadas por los diversos gobiernos para hacer frente a los contagios.
Sin embargo, en la otra cara de la moneda, las afectaciones que ha dejado esta epidemia global son el regreso de la producción y consumo de plásticos de un solo uso, debido al aumento considerable en la generación de cubrebocas, guantes, caretas, envases de gel desinfectante y de jabones para manos, trajes médicos protectores o kits de prueba. Además, hay que considerar que el confinamiento incentivó las compras en línea y la entrega a domicilio, por lo que la producción de empaques para estos productos, también incrementó.
A su vez, estos desechos, junto con las toneladas de residuos médicos de hospitales, y la caída histórica de los precios del petróleo -que dio como resultado que fuera más barato producir plásticos vírgenes que con materiales reciclados-, han colapsado los sistemas y la viabilidad de las instalaciones de reciclaje en diversos países.
Según cálculos del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), mientras que una cama ocupada por un paciente sin COVID-19 genera un promedio de 1.5 kilos de desechos diarios, una con un paciente con esta enfermedad produce 9 kilos. Así también, el Consejo Empresarial del Plástico anunció en septiembre del año pasado que la producción de bolsas de plástico aumentó en 200% entre abril y junio, periodo en que las autoridades sanitarias exhortaron a quedarnos en casa.
De igual modo, de acuerdo con estimaciones de las Naciones Unidas, “menos del 10% de los plásticos utilizados durante la pandemia se reciclarán alguna vez, y más del 70% llegará a los vertederos o al medio ambiente”. Por su parte, la directora de comercio internacional de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), Pamela Coke-Hamilton, afirmó en julio pasado que “la contaminación por plásticos ya era una de las amenazas más grandes a nuestro planeta antes del coronavirus, y el rápido aumento en el uso diario de ciertos productos que ayudan a proteger a las personas y a detener la propagación del virus está empeorando las cosas”.
Pero entonces, ¿qué podemos hacer para cuidar el medio ambiente durante la actual pandemia? Sabemos que las grandes industrias debieran ser las responsables de tomar medidas en pro del cuidado del ambiente y para intentar revertir el cambio climático, ya que ellas son las que generan las mayores afectaciones al ambiente, pero no por ello nosotros como ciudadanos debemos quedarnos con los brazos cruzados.
Por esta razón, te dejamos algunas recomendaciones que puedes tomar para cuidarte de este virus y, además, cuidar al planeta:
- Invertir en cubrebocas reutilizables o en una que requiera el cambio de filtro cada cierto tiempo, además de asegurarse desecharla en lugares designados para ese fin.
- Lavarse las manos teniendo en cuenta el ahorro del agua. Si bien el lavado frecuente de manos ha sido una de las medidas más solicitadas por las autoridades contra el contagio de COVID-19, hay que tomar en cuenta que no por ello debemos dejar abierta la llave mientras durante los 20 segundos solicitados, pues en este tiempo se desperdician aproximadamente dos litros de agua.
- Usar jabones o sanitizantes ecológicos, así como productos de aseo personal sin petroquímicos, pues estos cuidan de la salud de la piel y también protegen el medioambiente.
- Aunado a ello, para la limpieza del hogar, una opción amigable con el medio ambiente es adquirir los productos de limpieza a granel o comprar los de mayor cantidad.
Asimismo, debemos ser conscientes de nuestro entorno, cuidando las áreas verdes y exigiendo a las autoridades la preservación de las mismas, pues estas, además de traer beneficios para la salud física y mental, desempeñan un papel clave en la mitigación del cambio climático y la pérdida de biodiversidad al enfriar naturalmente calles y hogares, y proporcionando un hábitat para la fauna local.
