Sondeos locales indican que los padres no quieren volver a la escuela

(LeMexico) – La opinión de los padres de familia es clara pero parece dividida. Para las autoridades, el regreso a las escuela ses necesario, los padres de familia piensan otra cosa.

Las encuestas locales emitidas desde y por los centros de trabajo escolar arrojaron que un amplio porcentaje de los padres de familia no están de acuerdo, en conjunto con los docentes y directivos, en la imposición, presentada como una decisión soberana de cada escuela, del regreso a clases este 7 de junio. Esto debido a las pocas garantías y nula seguridad presentada a toda la comunidad escolar al no haber condiciones idóneas para la reapertura.

Pese a que la SEP ha compartido los lineamientos para el regreso a clases presenciales, hay muchos vacíos y lagunas en torno a las operaciones y responsabilidades de esta nueva modalidad. Por ejemplo: el regreso a clases exige insumos para el aseo de la escuela, insumos para los cuales el Gobierno no ha liberado presupuesto para comprar el gel, papel higiénico, cubrebocas y demás enceres para seguir con los protocolos para la prevención de contagios. Aunque el documento normativo parece estar “muy bien delineadono hay descarga de responsabilidad con respecto a la adquisición, ejecución y vigilancia del tal.

Con respecto a la opinión de los padres, hay una constante muy interesante: el voto de los padres que quieren que sus hijos regresen lo más pronto a clases corresponde a los alumnos cuya participación y actividad en esta temporada a distancia ha sido muy escasa y nula. En cambio, los padres cuyos alumnos han cumplido, poco, mucho o completamente, están de acuerdo con mantener la educación a distancia.

Las razones que los padres presentan para no regresar a clases se orientan en tres vías de percepción muy cercana a ellos. Para empezar, aseguraron que, aunque se mantuvo el ánimo de trabajo, éste no cumplió su función de enseñar. Con todo, prefieren continuar así antes que arriesgar a sus hijos. Además no confían en los protocolos ni acciones que se puedan llevar a cabo en los planteles, pues no todos los niños tienen la misma consciencia. Asimismo, “en casa hay bastante gente cercana no vacunada y vulnerable“. Por último, refieren que el gasto que implica volver pega directamente en las economías que apenas van recuperándose.

Por su parte, la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) presentó un sondeo en el que 54% de padres a nivel nacional no están de acuerdo en el regreso presencial, el 46% está a favor de éste; hace dos días emitió la actualización de este sondeo en el que ahora 8 de cada 10 integrantes de la comunidad educativa (padres, alumnos, maestros, directivos y apoyo) no están de acuerdo en el regreso a clases. Por su parte, OCCMundial, la bolsa de trabajo online, proporcionó datos que entre sus usuarios, 6 de cada diez no enviará a sus hijos a las actividades escolares presenciales hasta que se cumpla una de las más importantes premisas para el retorno: avanzar al menos 70% de vacunación nacional.

El otro 20% de votantes están divididos entre llevar a sus hijos y no saber qué decidir. Las razones que ponderan ante estas posturas son “el poco aprovechamiento que se ha tenido con esta modalidad” y “el derecho y necesidad de convivencia de sus hijos“, al comentar los lineamientos que responsabilizan y obligan a los padres con el cuidado de sus hijos toman cierto aire de indiferencia y despreocupación y es que la apatía que los padres que se hizo notar con respecto al desarrollo integral de sus hijos en este periodo pandémico fue más notable que lo habitual.

Los casos de los alumnos son muy particulares, pero entre los padres circula esta máxima: “La falta de convivencia, el rezago y la economía se soluciona, la muerte no“. Además, ellos son conscientes que no todos los papás inculcan ni educan de buena manera a sus hijos.

Un testimonio anónimo que junta una larga lista ha desatado intrigas: «mi hijo dice que sus compañeros quieren contagiarse para ir a contagiar al profesor de matemáticas que “los reprobó”». También hay rumores de que los padres esperan el momento para “ir a cobrar” las malas calificaciones de sus hijos, situación que la SEP hace de su desconocimiento. Además, muchos papás opinan que los que llevarán a sus hijos “ya no los soportan o por fin consiguieron un trabajo y no hay quién les cuide a los hijos“, denunciando que lo que muchos harán es “usar la escuela de guardería“, lo cual, no es algo nuevo y tampoco sirve de mucho.

Los testimonios son varios y los contextos locales se enumeran en cientos para evitar a toda costa la reapertura de las escuelas. Si bien, no se evitará que sea oficial, el consenso es claro: muchas escuelas seguirán a distancia hasta el siguiente ciclo escolar o hasta que sea seguro, tomando palabra del carácter opcional que hasta el momento ha recalcado el Gobierno Federal.

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