¿Qué hay detrás del descubrimiento del yacimiento de petróleo en Tabasco?
(LeMexico) – Durante el 18 de marzo de este año, el líder del Ejecutivo Federal, el presidente Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer que se encontró un yacimiento muy grande de petróleo en el Estado de Tabasco y que se calcula que la reserva de barriles ronda en los 600 millones.
El descubrimiento de este yacimiento puede fortalecer la estrategia del gobierno, que pretende reactivar la producción en el sector petrolero. Es importante recordar que este gobierno ha apostado por la extracción de petróleo para generar combustible en el país.
El mandatario dio a conocer que este yacimiento se llamará Francisco Múgica para conmemorar al general revolucionario. También, expresó que el lugar donde se encuentra este yacimiento resulta estratégico, pues está muy cerca de Racemosa y Valeriana que son los yacimientos que equivalen a cerca de 900 y 1,200 millones de barriles de petróleo. El presidente mencionó que este material pertenece al pueblo y, en su discurso conmemorativo sobre la Expropiación Petrolera, recalcó la importancia que tiene este recurso en el país.
Estas acciones fortalecen la decisión del presidente de apostar a rescatar Pemex, pues Octavio Romero Oropeza, director de la petrolera estatal, informó que se pretende reducir la deuda que tiene la empresa, ya que esta se encuentra en más de 110,000 billones de dólares y pretenden que durante este año esa deuda se reduzca en aproximadamente 6,412 millones de dólares.
Esa información causó opiniones encontradas, pues desde las campañas políticas del actual presidente mencionó que terminaría con la Reforma Energética, aprobada durante el gobierno de Enrique Peña Nieto por parte del PRI, PAN y PRD. Sin embargo, cuando llegó a ocupar el cargo de presidente expresó que los contratos que se generaron durante la Reforma Energética prevalecerían. No obstante, ya no se entregarían nuevas concesiones durante su administración.
Además, informó que el crudo que será extraído de este nuevo yacimiento no será para exportación sino para que sea refinado dentro del país. De esta forma, México podrá producir su propio combustible y no será necesario consumir lo de otros países.
Ante estas declaraciones, es importante recordar un dato llamativo. El año pasado, la producción diaria de petróleos mexicanos fue de 1.6 millones de barriles, la cual se considera la más baja en los últimos 40 años. Esto hace que la población se pregunte si el encontrar este yacimiento y otros dos durante la administración del presidente será suficiente para observar mejoría en la producción de esta empresa.
Por su parte, algunos expertos han mencionado que los nuevos descubrimientos dejarán ver resultados a largo plazo, pues es necesario comenzar a trabajar en ellos y el tiempo que esto implica no es corto. Además, expresan que en el momento en el que se comiencen a trabajar los yacimientos se sabrá la calidad del piso y de todos los recursos que influyen en la producción de los barriles y el tiempo que llevará extraerlos.
Desafortunadamente, el panorama de la empresa no es alentador, ya que justo el año pasado se registraron pérdidas equivalentes a 480,966 billones de pesos. Comparado con el año 2019, las pérdidas representan un aumento del 38%.
Sin duda, el descubrimiento de este yacimiento es una gran noticia para el pueblo mexicano. La última vez el país trabajó un campo petrolero de una magnitud tan grande fue 1976. Este yacimiento ha dado al país 13,400 millones de barriles en los distintos campos entre los que se encuentra Ixtoc, Akal, Chac, entre otros.
Otro dato importante que mencionó el presidente de la República fue que tiene la intención de extraer aproximadamente la mitad del número de barriles que explotó el gobierno de Vicente Fox y que esto será de ayuda para evitar el consumo excesivo de combustibles que pueden provocar daño a las generaciones futuras. Por otro lado, informó que aumentará el presupuesto que permite la perforación para adquirir gas y planifica reducir impuestos para que petróleos mexicanos mantenga el programa de operación que ha llevado hasta ahora.
Es conocido que, desde el inicio del sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador optó por una política en donde apoyó el sector energético con la idea de terminar con la corrupción dentro de Petróleos Mexicanos. Desde su campaña hizo mención de que no se presentarían más casos de corrupción como el caso Odebrecht ni sobornos.
Ante esto, una gran cantidad de integrantes del equipo de la 4T luchan para evitar esas restricciones en la Ley de la Industria Eléctrica. En este sentido, el presidente López Obrador comparó su política con la que llevó a cabo el expresidente Lázaro Cárdenas, en donde decretó la Expropiación Petrolera con la finalidad de que los recursos pertenecieran y se quedarán en la nación.
No es la primera vez que López Obrador se compara con este expresidente en un acto público y el pasado 18 de marzo manifestó que su finalidad es frenar la privatización en el sector energético, pues el petróleo pertenece sólo a los mexicanos. Ante estas declaraciones, dio a conocer un decálogo que pretende intentar rescatar al sector energético.
Entre los aspectos importantes que mencionó de este decálogo se encuentra la creación de las refinerías que tendrían la finalidad de producir la gasolina que consume el país, así como el dar a conocer que no habrá aumento en el combustible, ni en el diesel y la gasolina. Esta idea resulta un poco contradictoria para la población mexicana, quienes han reportado aumento de gasolina en los últimos 3 meses.
Este último punto debe considerarse importante y los mexicanos deben analizar qué tan cierta es la política del presidente López Obrador, además de plantearnos si no es necesario realmente incorporar nuevas tecnologías en la producción de energía. Es decir, más de un estudio da a conocer la importancia de tener energías renovables y que no dañen el ambiente.
