¿Por qué se venera a San Judas Tadeo cada 28 de mes?

Cada día 28 de mes se repite la misma dinámica en la Ciudad de México: una gran multitud de peregrinos católicos se concentran en la iglesia de San Hipólito, ubicada en el cruce de Avenida Hidalgo y Paseo de la Reforma, para venerar a San Judas Tadeo, patrono de las “causas difíciles”.

Sin embargo, el 28 de octubre es la cita de mayor afluencia en este recinto, ya que ese día se recuerda el asesinato de este santo y también el de San Simón.

Pero entonces, ¿por qué cada 28 de mes se celebra a San Judas Tadeo? Pues aunque el Calendario Litúrgico Católico marca el 28 de octubre como la fecha principal de este santo, el Padre José de Jesús Aguilar explica que “los devotos han decidido que esta festividad se lleve a cabo cada 28 de mes, para que su devoción se mantenga siempre firme”.

Por su parte, Sergio Román, padre y especialista en religiosidad popular, menciona que, en un principio, los feligreses consideraban a San Judas Tadeo como a un santo al que nadie le pedía (debido a que comparte el mismo nombre que el traidor Judas Iscariote). Por lo tanto, que tenía pocos asuntos que atender, así que comenzaron a pedirle a él.

Asimismo, según Aguilar, la devoción a San Judas Tadeo comenzó hace más de 60 años, cuando aumentaron las noticias de que este santo abogaba por los “casos difíciles y desesperados” y también por la popularidad y los milagros atribuidos a su escultura, la cual llegó al templo de San Hipólito en 1955, que fue movida al altar principal en 1982 por esta situación.

Por este motivo, la figura de San Judas Tadeo pasó de estar en el olvido a ser uno de los santos con más popularidad entre los fieles católicos.

¿Y por qué es el “patrono de las causas difíciles”? Esto es porque sus fieles aseguran que San Judas Tadeo tiene un poder milagroso para resolver todos los problemas, por lo que se le piden favores para conseguir empleo, casa, solucionar crisis matrimoniales o económicas y, en muchos casos, para que la gente salga de prisión o para salir bien librados de un problema judicial.

No obstante, José de Jesús Aguilar indica que hay quienes piensan que este santo protege también a quienes hacen maldades (debido a que lo confunden con Judas Iscariote, el cual traicionó a Jesús). “Pero están en un error, porque no hay ningún santo que protege a quien se dedica al mal”.

Ahora, ¿por qué los feligreses acuden al templo de San Hipólito y no a una iglesia con el nombre de San Judas Tadeo? La razón es porque este recinto alberga la imagen más venerada de él, en la Ciudad de México, lo que lo convierte en el principal sitio para el culto de este santo.

Sin embargo, en la capital sí hay una iglesia dedicada a este santo, y se ubica en avenida Instituto Politécnico Nacional, en la alcaldía Gustavo A. Madero.

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