Hoy es el Día Internacional contra el Cambio Climático, ¿cómo va México en la materia?

Muy mal, pues en México ha habido recortes importantes de presupuesto en organismos que se encargan del combate y la mayor inversión energética va a hidrocarburos.

No hay acciones que aplaudir, no hay iniciativas significativas, no hay nada de lo que México pueda estar orgulloso este día, pues no estamos combatiendo nada. Todo lo contrario, se incentiva el uso de combustibles fósiles que se ha demostrado, es lo que más afecta a nuestro planeta.

Nuestro país firmó hace 5 años en el tratado internacional de París. La pandemia ha detenido el recuento y la reunión de mandatarios para ver los avances, pero cuando nos llegue la hora de rendir cuentas: ¿Qué dirá el presidente?

Pues, que somos el lugar 12 en la lista mundial y el primerísimo lugar en América Latina de países generadores de carbono. Para el presupuesto 2021, se destinará sólo el 1,1% para la lucha contra el cambio climático, en teoría, porque la mayor parte de esos recursos se ira a el gas natural que, de haber fugas en los ductos de recuperación, la contaminación que emanaría sería mucho mayor que la de quema de petróleo.

El presidente Andrés Manuel López Obrador eliminó el Fondo de Cambio Climático, parte de los 109 fideicomisos eliminados. Con este ritmo perjudicial al clima, no cumpliremos el compromiso de París, que es reducir un 22% de emisiones de carbono para el 2030. El mensaje es muy claro, al presidente no le interesa el medio ambiente, a dos años de mandato no ha generado ninguna política, ley o decreto significativo para la conservación de la biodiversidad, vamos en reversa con él.

Sí, él no ha negado el cambio climático como sus coetáneos Trump y Bolsonaro, pero se contradice en sus políticas. Solo hay 30 proyectos del Plan Nacional de Desarrollo vinculados al combate del calentamiento global y eso de forma indirecta, la Ley de Transición Energética obliga a nuestro país a la producción de la energía de fuentes limpias en un 25% para el 2018. Pues al día de hoy, el 2020, la Secretaría de Energía cambio la estimación al 24%, a la cual por supuesto no nos hemos aproximado. El 70% de las emisiones carbónicas, corren a cargo del sector energético.

El petróleo, combustible sumamente contaminante, tiene una meta para el 2024 de producción de barriles de 2,2 millones por día. Con la refinería de Dos bocas se emitirán 20 millones, pero de toneladas de carbono. No hay subsidio para parques eólicos y solares, pues quienes han desarrollado esta tecnología son empresas extranjeras. Así que el gobierno federal no piensa apoyarles, al contrario, hay aumento de cuotas hacia ellos con la finalidad de que no compitan con la Comisión Federal de Electricidad.

Urge, sin duda alguna, una mente más abierta del ejecutivo, pues no se está mirando hacia el futuro, ya que en México no se está apoyando tampoco a la ciencia y a la tecnología para que nosotros mismos creemos nuestros propios sistemas sustentables. Es posible otorgar acuerdos a estas empresas para que nos enseñen a utilizar estas energías.

El presupuesto para el ambiente se tiene que incrementar, el ecoturismo es sustentable, hay comunidades que lo han desarrollado, al sur, al norte, al este, en todos los lugares de nuestro basto y rico país en biodiversidad y las ganancias han sido buenas, tanto para el ambiente como para los habitantes.

Es por eso, en este punto sin retorno abismal en el que nos encontramos cerca de dar paso al desastre ecológico, que debemos hacer conciencia y exigirle a nuestro gobierno que no se tome tan a la ligera el tema. No todo es el tren Maya y la supuesta derrama ecológica que tendrán los estados del sur, que opinión de muchos era una parte del país que muchos mandatarios no habían visto.

Sí, Andrés Manuel López Obrador por fin está volteando hacia la región y al estado de donde es originario, pero el impacto que el proyecto tendrá a la larga, ¿será el mejor? Aunque el gobierno no lo crea, si hacemos una transición de negocios a fuentes sustentables se generarían 395 millones de empleos.

Recordemos que estamos en la sexta extinción masiva de animales, ya hay más de un millón de especies amenazadas de extinción, entre ellas nuestros ajolotes, nuestros monos araña, nuestros jaguares, y el Tren Maya es un grave peligro para estas y más especies. Dos bocas, ya vimos cuantas toneladas de carbono generaran, no podemos ser tan egoístas y no pensar ni en las especies vegetales ni animales, ni en las generaciones humanas del futuro.

Por último, unos datos perturbadores del Fondo Económico Internacional de acuerdo a las siguientes décadas y en caso de que el escenario mundial se mantenga igual de incrédulo e indiferente.

2030
• Casquetes polares y capas de hielo derretidas creando un incremento de 20 centímetros en el nivel del mar.
• Pérdida del 60% de los corales y lechos marinos.
• El rendimiento de los cultivos será menor, por las sequias y falta de nutrientes en la tierra, esto orillará a 100 millones de personas a la pobreza extrema
• Enfermedades respiratorias vinculadas directamente con el cambio climático y mala calidad del aire, mataran a 250,000 personas por año

2040
• El Acuerdo de París no será cumplido y el límite del incremento de temperatura de 1,5°C ya habrá sido sobrepasado.
• Migración masiva de países como Viet Nam, Tailandia y Bangladesh por las fuertes inundaciones.
• El 8% de la población mundial no tendrá acceso al agua.
• El ártico sin hielo.
• El nivel del mar ya con un incremento de 60 centímetros, tormentas y oleadas devastadoras en el Golfo de México.

2050
• Temperaturas de hasta 60°C en un par de meses por año, afectando a 2 mil millones de personas.
• Las mascarillas obligatorias, no para proteger contra el coronavirus, sino para proteger del smog a los pulmones.
• 25 grandes inundaciones por año, esto ya es una realidad en el noroeste de Estados Unidos, que ya tuvieron la primera este año.
• Por falta de agua, alimentos y fenómenos meteorológicos, se desplazarán 140 millones de personas en busca de mejores condiciones.

2100
• En el norte del planeta, la temperatura disparada, a más de 4°C del promedio.
• Las costas ya estarán irreconocibles, Florida y algunas otras penínsulas ya habrán desaparecido.
• Arrecifes de coral desaparecidos y con ello una cuarta parte de los hábitats de peces del mundo.
• Insectos de todo tipo ya sólo serán historia, afectando la alimentación humana, pues no habrá debido a la falta de polinizadores.
• Sequias en 40% del planeta.
• Quemas anuales del tamaño de Massachusetts.
• Desierto al sur de España y Portugal, sin agua ni alimentos en estas zonas.