En Haití la vida depende de la policía y los bandidos
Los habitantes en el país han cambiado el melancólico “Si Dios quiere” por un triste y terrorífico “Si los bandidos y la policía quiere” debido al aumento de la delincuencia en la isla.
Los secuestros, desapariciones y demás crímenes que han ido en aumento en Haití fijan que la vida y la muerte está en las manos de los criminales y la policía.
Desde las balas perdidas en los enfrentamientos de pandillas con la policía hasta la elección “azarosa” de los criminales ha sido el granito de arena para convertir al país en una “cacería humana sin razón“.
Incluso, los habitantes consideran que todos están en la mira de la delincuencia y tarde o temprano serán víctimas. Nadie está exento: estudiantes, policías, ricos, trabajadores.
Aunque la delincuencia e inseguridad es propio de cada país, los ciudadanos de la isla exigen al Gobierno que se haga responsable de encarcelar y limpiar la nación para regresar la seguridad que le deben al pueblo.
