Se fractura el grupo feminista que tomó la CNDH en República de Cuba debido a acusaciones mutuas
Este miércoles 16 de septiembre se dio una fractura en el seno de los colectivos que mantienen la toma del edificio de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en el Centro Histórico, la cual se dio por el control de ese espacio.
Las madres, víctimas y el llamado Bloque Negro Feminista no lograron resolver “diferencias de criterio” y a través de videos subidos a sus redes sociales se lanzaron señalamientos mutuos que dejaron ver la ruptura.
El colectivo Ni Una Menos, que es conformado por familiares de víctimas y es encabezado por Yesenia Zamudio, señaló que las autodenominadas “anarquistas” se atribuyen la toma de las instalaciones, cuando en realidad fueron las familias quienes concretaron esa acción con el apoyo del bloque negro.
“Este espacio es para las víctimas (las anarquistas). Dicen que el inmueble lo tomaron para ellas, pero no. ¿Qué creen? Que este inmueble es de Ni Una Menos y para las familias. Nosotras las apoyamos, pero ya hay muchas familias que se han deslindado de ellas”, señaló Zamudio en un video que subió en su cuenta personal de Facebook.
En el mensaje audiovisual, la activista –quien es madre de una chica que estudiaba en el Instituto Politécnico Nacional y fue víctima de feminicidio en 2016— respondió con molestia a las acusaciones en su contra que, dijo, ha lanzado el Bloque Negro, de haber robado comida, medicamentos y ropa que la ciudadanía ha donado al movimiento.
“Dejen de estar de hociconas, diciendo que me estoy enriqueciendo. No nos estamos robando las despensas. Todo esto es para las familias, porque somos las víctimas”, enfatizó Zamudio.
En el video, en el que aparecen decenas de mujeres y algunos hombres, todos con los rostros descubiertos y usando cubrebocas, la líder de Ni Una Menos exigió por el contrario que su compañera Erika Martínez –otra de las caras visibles de la toma— transparente y entregue los estados financieros de la cuenta a su nombre que se abrió para recaudar fondos para el movimiento.
La separación
Yesenia Zamudio confirmó su salida del recinto de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en el Centro Histórico por diferencias con otros grupos feministas.
Zamudio es madre de María de Jesús Jaimes Zamudio estudiante de Ingeniería Petrolera en el IPN, asesinada en enero de 2016.
En un post de Facebook afirmó que se retiró de la CNDH por amenazas a su familia y al mismo tiempo denunció que hay gente infiltrada en el gobierno.
En otra publicación dijo que, tras una reunión con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, “la funcionaria aceptó que hay pseudo activistas que lucran y les cobran a las víctimas por asesorarlas o acompañarlas y afirmó que ya no habrá pactos y se mencionaron muchos nombres“.
En otro video dirigido a la señora Erika Martínez, otra víctima que ha tomado la sede de la CNDH, le reclama: “¿Qué viene aquí conmigo a pedir que le ayude? Y después dice que la estoy fregando“.
“Dice usted que la toma (de CDNH) es suya. Mire, ya nos salimos todas las familias. En nuestro Frente Nacional somos más de 250 colectivas de todo el país“, agrega y denuncia un conflicto de interés.
“Por eso yo me salí de la toma, porque quería llevar a las compañeras con Olga (Sánchez Cordero) […] Quédense contentas, lograron lo que consiguieron: nos salimos de ahí, pero ¿qué creen? Así nos quedemos en el Zócalo, así nos quedemos en la calle o así tengamos que pagar hotel, no vamos a dejar de pedir justicia por ustedes“.
“Yo soy feminista y defiendo mis derechos humanos y los de otras personas, no nada más los de un grupito que creen que porque se encapuchan ya lo consiguieron todo“, continuó.
También denuncia a Sandra Soto por pedir dinero a nombre de la señora Erika y también menciona nombres que la están acosando como Silvana Ornelas, Liz Machuca, Malú Andrade y Mar Cruz.
Finalmente, se ha perdido el objetivo inicial por el cual se tomó el espacio de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y sólo se quedaron las activistas que se identifican como el Bloque negro.
