“Llévense a mis hijos ya no tengo cómo mantenerlos”, externó la madre tras carencia de alimentos

La madre es una joven de 20 años llamada Dulce Ramírez Gonzáles y tiene tres hijos.

En el contexto de la COVID-19, la mayor vulnerabilidad alimentaria de México es una amenaza real y solo una acción coordinada e inmediata en términos de políticas de protección social puede detener esta situación.

Un caso que pone en evidencia esta vulnerabilidad es el de una joven que pidió que se llevasen a sus hijos por falta de recursos para mantenerlos. Ella misma explicó que estaba desempleada por cuidar a los pequeños. Añadió que su pareja emocional los había abandonado cuando comenzó la pandemia por el actual coronavirus.

La desesperación de la joven madre era tan grande por no tener recursos o un medio para alimentar a sus tres hijos (Kenal, Lionel y Jesse, de 5, 3 y 2 años), por lo que decidió llamar al 911 para informar que 3 menores estaban en riesgo.

“Llévense a mis hijos, ya no tengo cómo mantenerlos y no quiero verlos sufrir”, externó la madre a los policías. La policía de Coahuila trató de tranquilizar a la mujer, diciendo que, a pesar de la complicada situación, esta no era la mejor manera de lidiar con ella o darle solución.

Los programas alimentarios y el abasto de alimentos en países como México no deben cesar. A medida que la COVID-19 se propaga rápidamente por todo el mundo, con parálisis económicas y en todos los sectores de la sociedad, la crisis alimentaria resulta alarmante y agobiante para algunas familias mexicanas, sino es que en su mayoría.

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