“Te tratan como a un animal”: Rayshard Brooks habló en una entrevista meses antes de su muerte

En una entrevista realizada para CNN dada a conocer por The Guardian del 20 de febrero pasado, Rayshard Brooks reveló la percepción que tenía acerca del sistema de justicia norteamericano y la manera en que fue víctima de él, antes de ser asesinado.

“Siento que parte del sistema podría, ya sabes, mirarnos como individuos. Tenemos vidas, ya sabes, fue solo un error que cometimos, ya sabes. Y no, no solo tratarnos como si fuéramos animales. Sabes, encerrarnos”.

Brooks, que sólo contaba con 27 años, respondió al entrevistador acerca de su detención ilegal. Asimismo habló sobre el fraude financiero con tarjetas de crédito, del cual fue inculpado. Mencionó que su defensor público le dijo que si se declaraba culpable su pena se reduciría o, de lo contrario, podría ser condenado a 10 años: “Estoy como, ‘Dios mío, tengo hijos aquí’ … así que estoy tratando de hacer la mejor opción posible para volver a la sociedad”, dijo.

Brooks describió cómo fue estar encerrado y cómo es que alguien le dijera en qué momento despertar y a dónde dirigirse. Confesó que afectó su estado mental al salir.

“Al pasar por ese proceso, me endureció en un punto, sabes, que me gusta, oye, sabes. Tengo que tener mi guardia en alto porque el mundo es cruel, ya sabes, me llevó ver las cosas diferentes. Y, ya sabes, en el sistema sólo lo sabes, solo te hace endurecer hasta cierto punto”, recordó.

Brooks dio su opinión del sistema de justicia penal norteamericano. Esto, afirmando que dicho sistema no hizo nada para ayudarlo a salir de la sombra del registro penitenciario. Al salir, buscó un trabajo, pero sus antecedentes lo perseguían casi en cada paso.

“Vas a llenar tu solicitud y llegas a esta pregunta, ‘¿Alguna vez has sido condenado por un delito o alguna vez has sido arrestado?’ Y, sabes, te sientas allí como, ‘oh, Dios mío… Espero que esto no me impida conseguir este trabajo’… Entonces terminas la solicitud y tienes algunos empleadores que te dicen: ‘Bueno, señor Brooks, desafortunadamente, no podemos contratarlo por el hecho de que haya sido encarcelado o haya sido… arrestado por esto y aquello”, dijo.

“Tu corazón simplemente se rompe”, dijo. “Pones tanta energía, tienes tanta esperanza, sales a intentar producir”.

Brooks agregó: “No nos están financiando, ya sabes, no están diciendo ‘oye, vamos a darle un cheque … tal vez algún tipo de ayuda para que te recuperes’ … Es sólo un montón de presión. Ya sabes, tener todo eso en tu hombro y en tu espalda … Algunas personas simplemente no pueden lidiar con eso. Sabes que algunas personas dicen, ya sabes, que están considerando suicidarse”.

Brooks dijo que estaba muy endeudado después de salir. Necesitaba pagar las multas judiciales y las tasas de restitución, además de seguir manteniendo a su esposa e hijos. Lo que más necesitaba era ayuda del mismo sistema que le había dado la espalda al encerrarlo.

“Siento que debería ofrecerse, ya sabes, quiero decir, a cada individuo que ha pasado por estas cosas debe ser asignado a cierta persona para ayudar a guiarlo, sabes. Quiero decir, así es la libertad condicional, pero en la libertad condicional no están allí contigo todos los días, como un mentor o algo así (…) No te van a sacar a ayudarte a buscar un trabajo. Tienes que hacer estas cosas por tu cuenta. Y creo que debería haber una forma de que te asignen algún tipo de persona como un mentor para que, ya sabes, mantenga tu rastro, te mantengan en la dirección en la que debes ir … pero ahora estoy fuera y tengo que tratar de arreglármelas por mí mismo”.

Las palabras más reveladoras fueron aquellas con las que concluye la entrevista. En estas menciona que aún tenía la esperanza de una vida mejor: “Estoy intentando, ya sabes, no soy el tipo de persona que se rinde. Y continuaré hasta que llegue a donde quiero estar”.