Coronavirus: la advertencia de la tierra
La paralización de la vida cotidiana es la prueba de que no controlamos las fuerzas de la naturaleza como quisiéramos, a toda causa hay un efecto.
Cambio en los usos y costumbres de consumo, de la vida laboral, la muestra pública del peor y del mejor lado del hombre, mayor conciencia en el impacto en el ecosistema que habitamos, son algunos de los tópicos que ha traído consigo la pandemia de SARS-CoV-2, la cual perteneciente a una familia de virus detectados desde 1968 que producen el síndrome respiratorio agudo grave, SARS por sus siglas en inglés.
Y es que pareciera para muchos que esta pandemia únicamente ha traído desgracias y enfermedad, algunos otros consideran que esta pausa, además de ser un respiro para el planeta, es la pauta para tiempos venideros con mejor conciencia ambiental, ya que, si buscamos el origen del virus, podemos constar que todo es debido a la explotación excesiva y abusiva del medio ambiente.
Primero que nada, según expertos de la BBC, ¿por qué se origina un virus?
- Cambio climático: altera el hábitat de los animales, su reproducción y también, igual que los humanos, sus usos y costumbres de consumo, es decir, su alimentación. La cadena alimenticia es modificada, ya que los otros animales incluidos en su dieta se desplazan a diferentes zonas en busca de su entorno habitual.
- La sobrepoblación en las ciudades: más de la mitad de la población vive hoy en día en las ciudades, años atrás el porcentaje de la población de las ciudades era únicamente del 35%. Al haber más concentración de humanos, también propicia un incremento de ratas, zorros y conejos, cada animal es portador de ciertos microrganismos e inclusive virus que, al estar en contacto con más especies, se alojan en ellas y mutan buscando su reproducción. La especie que más ayuda como huésped, es la humana.
- Incremento de viajes internacionales: desde los años 70 hasta la actualidad, el tráfico se ha multiplicado 13 veces, es decir, 4 mil millones de vuelos anuales. Con esto, la capacidad de viajar de los virus se ha multiplicado gracias a este factor que los vuelve una amenaza global.
Si bien es sabido que el origen de los virus es animal, no es de forma intencional el que animales propaguen las enfermedades, sino de los humanos que los cazan, los comen, les quitan sus pieles, queman su ecosistema. En fin, somos nosotros quienes manipulamos a los animales sin consideración ni respeto alguno para la satisfacción de nuestras necesidades.
¡Y acostumbrémonos! Ya que, si ninguno de estos tres factores cambia, lo cual se ve muy lejano, las pandemias serán tema permanente en nuestras vidas. Si bien es parte de gobiernos tomar cartas en el asunto de la sobrepoblación, igualdad de condiciones, el crecimiento de las grandes ciudades, leyes y penalizaciones laxas ante el cambio climático y al parecer la concientización poblacional del cuidado del medio ambiente.
Para esto, la ONU anunció ayer que su Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente que intensificará el mapeo de amenazas zootécnicas, buscando la reducción de las futuras pandemias. La intención principal es proporcionar apoyo a los países para la reconstrucción después de la crisis a través de ciencia más sólida, políticas que respalden la sustentabilidad y salud del planeta.
“Con la COVID-19, el planeta nos ha enviado un mensaje de advertencia muy fuerte: la humanidad tiene que reinventar su relación con la naturaleza. La paralización de las economías ha sido una respuesta a corto plazo ante esta amenaza, pero no puede perdurar. Construir economías que trabajen junto con la naturaleza será fundamental para garantizar la prosperidad de las naciones”, afirma la directora ejecutiva del Programa, Inger Andersen.
El programa desarrollará y apoyará a las naciones para enfrentar los riesgos sanitarios como el equipo de protección, aparatos electrónicos y fármacos de manera que la salud humana no se afecte o la del medio ambiente. También se creará un plan de respuesta y riesgo zoonótico para mejorar la capacidad de respuesta de los gobiernos ante estas situaciones. Fomentará mayores oportunidades para invertir en la naturaleza y la sostenibilidad por medio de la administración del programa.
Por ahora, el programa está en su mayoría enfocado a las respuestas pandémicas debido a la situación actual, pero la intención primordial es concientizar, reducir y hacer sustentable nuestra huella en la tierra. Muchos agnósticos, incluidos gobernantes, consideran que el tema no es importante y que no habrá un gran cambio después de la cuarentena, algunos otros creemos que el Coronavirus tiene su lado positivo. También es momento de tomar una pausa, concientizar, conectar con la naturaleza, ya que sin ella, no podremos seguir adelante.
